¡¡¡NOS ATACAAAaaan!!!... ¿dados?


¿Es la fiebre de haber trabajado toda la semana o eso que intenta comerse mi cerebro es un dado? Pues aunque no ande sobrado de neuronas, parece que sí, que vuelven los zombies y esta vez en forma de dados. ¿Aún no conocéis la forma de moda de comer cerebros? Hoy os analizamos Dados Zombie.

Espera un momento, ¿dados? Lo primero que se plantea uno es cómo unos dados pueden servir para crear un juego de zombies y generar medianamente una ambientación aceptable. Pues aunque no lo creáis, Dados Zombie da mucho el pego.
Lo primero que me atrajo es la presentación del juego:


Un pedazo de cubilete y tres dados con símbolos de colores. ¡Y en el cartón promete que dentro del cubilete hay 10 dados más! La cosa pinta interesante...
Al darle la vuelta vemos su precio: en torno a 10 macarenos. La cosa mejora por momentos. Un juego barato, con dados de colores y un cubilete "to guapo", y según dice la contraportada (si podemos llamar así al trozo de cartón que tenemos entre manos) es tan rápido que se puede jugar en la cola del cine. Esto me cuesta imaginarlo, pero no lo descarto algún día si decido que quiero que me den una paliza.
Si con estas premisas caes en la tentación como yo, verás que todo era cierto (a excepción de lo del cine que no lo he probado aún). El material del juego se limita (además de las reglas, claro está) a 13 dados con 3 símbolos como éste:


6 verdes, 4 amarillos y 3 rojos es la distribución, y cada color simboliza la dureza del humano que pretendemos vilipendiar. Cada símbolo es bastante intuitivo:


Si nos sale cerebro, habremos conseguido abrirle la cabeza a la víctima de turno. ¡Ala, pa la saca! Nuestro objetivo es llegar a 13 sesos antes que el resto, así que hay que ir abriendo estómago.


Con el disparo la víctima se ha puesto gallita, somos unos zombies torpes y nos han impactado. No os preocupéis del todo, somos zombies duros y aguantamos 2 disparos sin despeinarnos, pero esta víctima mejor la dejamos...


¡Huellas! El humano ha conseguido escapar, pero sólo de momento... Seguiremos detrás de ella...

Ahora que entendéis los símbolos, el turno se desarrolla de la siguiente manera:
  • Lo primero es coger tres dados. No los que queráis, sino al azar, que un zombie no sabe distinguir entre presas fáciles o marrulleras...
  • Después, los más avispados lo habrán adivinado. Va, os dejamos tiempo para pensarlo... ¿No? Pues tirar los dados, coño. Y según el resultado:
    • Cerebro: se separan y lo dejamos a un lado. Serán nuestros puntos.
    • Disparo: también se separan y lo dejamos al otro. Si sacas tres a la primera, mírate si tienes mal de ojo. Pero principalmente, pasa el turno.
    • Huellas: se dejan delante. Si sacas tres, vuelve a meterlas en el cubilete y saca otros tres dados. Todas las víctimas se te han pirado y prefieres escoger otras tres...
  • Tras esto las opciones son dos: o seguir tirando (cogemos la/s huella/s que hayamos podido sacar y dados del cubilete hasta tener otra vez 3) o rendirse. ¿Y rendirse para qué, si hasta tener tres disparos no la espichamos? Bueno, pues básicamente porque si llegamos a tener tres disparos tras lanzar los dados, perderemos todos los cerebros que hayamos conseguido durante nuestro turno. Y lo pasaremos, claro está. ¡¡Esto es lo que le da la verdadera chicha al juego!!
No tardaréis en daros cuenta de que los verdes son los que molan. Rojo caca. Amarillo.... psé.

Sí, señores, es el último detalle el que le confiere a Dados Zombie su grado de adicción, que experimentaréis en cuanto aprendais a jugar y echéis dos o tres partidas seguidas. Sin esta regla el juego se limitaría a conseguir cerebros hasta sufrir tres disparos, azar puro y duro. Y no es que el azar no esté presente, que lo está y mucho, pero cuando tengamos 7 cerebros comidos y 2 disparos recibidos, continuar jugando puede significar la diferencia entre hacer una gran puntuación esta ronda o perderlo todo... Y seguro que el resto de zombies está igual de hambriento que tú y puede hacerse con la partida si te descuidas.

Un tipo con suerte...




Supongo que el desarrollo de la partida os lo imagináis: cada jugador juega su ronda y va apuntando los cerebros que consigue comerse. Gana el que llegue a 13, así que se jugarán tantas rondas como se necesiten para que alguno de vosotros, torpes zombies sin oficio ni beneficio, llegue a la cifra. Eso sí, en cuanto uno llegue, no penséis que el juego acaba. Hay que darle una oportunidad a los que llegan detrás de ti hasta terminar la ronda, así que vigílate de quedarte solo en 13 cerebros si hay alguno detrás cercano a la cifra... Porque al terminar la ronda ganará el que más cerebros haya conseguido. En caso de empate, se jugará una ronda extra entre los afectados. Pero oye, ¡¡el que tenga dudas que lo compre y lea las instrucciones, que yo solo estoy aquí para analizar!!

¿Qué dice el zombie?
  • Pros: el juego es simple hasta la saciedad y rápido, muy rápido. Con tipos con suerte la partida puede acabar en dos rondas, e incluso sin ellos la media puede estar perfectamente en 4. Además, tiene cierta dosis de riesgo y estrategia que lo hace adictivo para muchos. Y por supuesto, su precio: ¿10 euros? Si tienes un cumpleaños cerca, yo me acercaría a una tienda...
  • Contras: a los verdaderos fiebres de los juegos de mesa ésto le parecerá una niñatez demasiado simplona. Y los verdaderos fiebres de los zombies pensarán que ésto ni son zombies ni son na. Y encima el del cubilete sangra. ¡SANGRA! ¡HEREJÍAAAAAAA!  
En mi opinión conclusión: El juego está para lo que está. Echar un buen rato rápido y fácil sin tener que comerse la cabeza. Es ideal para grupos medianos de gente, de entre 4 y 6 personas, aunque perfectamente pueden jugar 2 personas. Una sóla ya me parece demasiado forever alone, pero allá cada cuál... No en vano ostenta el Premio Origin al Mejor Juego Familiar 2010 (lo que tardan estos juegos en llegar aquí...) así que ya sabéis como entretener a vuestros sobrinos...

No nos hacemos responsables si algún miembro de la familia padece estos síntomas

Por todo esto y porque el juego merece realmente la pena, le voy a endiñar un horondo y chulo:

Comentarios

  1. Está super bien
    Doy fe xD

    ResponderEliminar
  2. Pues tiene buena pinta, barato y simple no se le puede pedir más... ah si! Probarlo para ver el nivel de encanchamiento que produce

    ResponderEliminar

Publicar un comentario